» Helenð «

pero que.. pidfjipdfgnjlgmnkjgj<kjn<krgnjkfgn<rf ¬¬
poprk te lo an borrad???

Ya sabes que me encanta vale?? te lo dije en el otro.. ¿Lo llegastes a leer? T___T

Me encanta siguela pronto!
Pleaseee! :drunken:

joo que pena que no vayas a colgar >.<
Bueno, la espera merecera la pena xDDD

Lua, ya me as echo admin, sabes que yo si que lo entiendo, pideme ayuda en lo que quieras..=D!

hallo!!!
sabes?
me enkanta!!
esta mu bien!!
ya tienes casi todo el capitulo?? Bieeeeeeeeeeen!!!
Jajaja! Eso es primicia, en? xD
weno wapa, küsses!
yo pronto pondre la mia
xaitooooo!!

____________________

biiiiiennn!!!!!!

Perdón por tardar tanto, ahora tendé mucho mas tiempo asi que tendre mas tiempo para escribir >.<

Gracias por los comentarios

Este capi no me gusta mucho, solo me gusta la segunda parte... es que imaginaroslo... *O* bueno os dejo ya que es muy tarde. Besos !!


~ 2 ~

La furgoneta negra venía desde París hasta Magdeburgo. El chico de las rastas se sentó cómodamente cerca de la ventana, puso un pie encima de otro y aburrido observó el camino que recorrían las gotas de lluvia por la ventana. Georg y Gustav estaban ocupados jugando a "quién eructa más". Pese a practicar tanto, nunca han podido ganar al maestro especialista en eructos xD
Tom se tapó los ojos con la gorra y fingió que se había dormido. Gustav se sentó a su lado.
- Ey tú... soñador! ¿ Eructas con nosotros? - preguntó - Hoy el concurso es para el ercuto más melódico del mundo. ¿Vienes?
Tom fingía que la idea no le importaba. Esperaba que insistiese más. Al fin y al cabo, sabía de lo que es capaz.
- Venga, no te hagas el importante. - Gustav le dió en el brazo - Señorito, ¿le gustaría dedicarnos un poco de tiempo y eructar alegremente? - dijo con voz de mujercita de buen hogar. Los dos rieron a carcajadas. Tom logró parar de reír y empezó eructando la mitad del estribillo de I will always love you de Whitney Houston.
- Maestro - Georg no podía parar de reír - otra vez !
Tom empezó con un aria y explotó de risa después de unos instantes.
- Vale, ahora tú, Georg.
- Ok, especialmente para vosotros. Metallica. - tomó aire y comenzó con la canción Nothing else matters.
- No aguanto ! - gritaba Gustav - Tiempo! Tiempo... que exploto !
- Bueno Mark, demuéstranos de lo que eres capaz. - Georg le dió una colleja - Algo bueno !
- Será algo que tiene que ver con el tiempo de hoy... - aclaró.
Gustav pegó un chillido. Mark se acomodó en el sillón, y gritó - Hey! - y eructó todo el principio del estribillo de Durch Den Monsun.
Tom en un momento ya se encontraba a su lado. Le cogió de la garganta y le acorraló contra el sillón.
- Nunca más lo vuelvas a hacer! ¿Lo pillas? Nunca más! - gritó.
Estaba muy enfadado. En los ojos tenía mucho odio. Se acercó a su cara al máximo.
- Esa canción es sagrada! - la voz le temblaba - A ver si te entra en la cabeza! Sagrada ! ¿Está claro?
No pudo controlar el tono de su voz. Gustav y Georg primero no sabían qué hacer, pero luego rápidamente acudieron a ayudar a Mark. Estaba horrorizado. Intentaba huir de la presión de Tom, pero este no le dejaba.
- Tom, ya basta. - Georg hacía fuerza para ayudar al chico - Él solo bromeaba. Suéltale.
- Me importa una mierda! - gritó.
Le dedicó a Mark una mirada llena de furia y odio y le soltó. Sin decir ni una palabra más volvió a su anterior sitio cerca de la ventana.
- Ey Tom... - empezó Gustav.
- Vete a la mierda! - chilló y se dió la vuelta en dirección a la ventana. Los labios le temblaban nerviosamente.

***
Una gruesa capa de hojas cubiertas de oro cubrían el parque, que tan solo hace unas semanas cubrían las flores y la hierba verde. En la superficie del río se reflejaba el sol atardeciente. En el aire se podía respirar el invierno, que estaba a punto de llegar. Iban despacio. Helena admiraba el paisaje dibujado por el sol. Noelia iba arrastrando los zapatos sobre las secas hojas y las lanzaba a patadas por todas partes.
- ... y sabes, creo que él se piensa que yo me lanzaré sobre él y gritaré: eres estupendo! - continuaba Noe - Que cretino. Piensa que iré detrás de él como un perro. A las demás chicas se les caen las bragas cuando tan solo pasa a su lado, por eso intenta hacer lo mismo conmigo. Pero yo soy incompatible con ese tipo de bufones. ¿Y sabes qué mas me dijo? Que hoy estoy muy guapa... Que estoy muy guapa. ¿Te lo puedes creer? Dios, que imbécil. - bajó el tono de voz - Ey, ¿me estás escuchando?

Helena era una romántica. Tan solo el atardecer la emocionaba tanto que se le caían las lágrimas. Noelia mientras pisaba duro sobre el suelo, eso de soñar en las nubes no iba con ella.
- Una pérdida de tiempo, tengo cosas mejores que hacer. - decía. Con Helena tenía una amistad especial. Eran como el día y la noche. Dos personas muy contrarias, pero se querían mucho. Noelia ya se había acostumbrado a los frecuentes viajes de su amiga al reino de los sueños. Sin mebargo el comportamiento de Helena desde hace unos días había cambiado. Estaba preocupada por ella. Solo un poco. Noelia no solía ponerse histérica. Prefería investigar sobre el caso, para luego dar un buen consejo y actuar - sobretodo actuar. Odiaba quedarse de brazos cruzados.
- Helena, te estoy hablando. - intentaba sacarla de su mundo - Vuelve, la civilización está aquí, en la Tierra ! No tienes que buscarla en otro lugar. Hallo..Hizo un gesto con la mano delante de los ojos de Helena. No hubo resultado. Ya se preparaba para darle un suave golpe...
- Ay, Noeeee. Para ya con esas tonterías. - se había dado cuenta a tiempo - Sólo me había quedado pensativa.. ¿a tí nunca te pasa? - preguntó con una nota de irritación en la voz.
- Hmmm... - la chica se rascó en la cabeza - Me pasa, claro que sí, claro, pero solo cuando no he dormido lo suficiente.
Se rió.
- ¿Te ha pasado algo malo? - preguntó con cierta preocupación - Vas pálida y pensativa. No puedo contactar contigo. Ayer no te acordabas del encuentro, y hoy parece como si te hubieras perdido en el mundo... ¿no quieres hablar?
Noelia era capaz de pasar rápidamente de bromear a estar seria.
- No me pasa nada. Todo está bien. - Helena sonrió delicadamente. - Solo que últimamente duermo mal. Supongo que esa es la razón... - Mintió. Por primera vez. Se sorprendió, fue tan fácil. Hasta ahora nunca había tenido ningún secreto ante Noelia. Sabía, que Noe se reiría de ellla si supiese la verdadera razón.

***
El ángel de alas negras estaba sentado debajo del solitario árbol. Apoyó la cabeza sobre el grueso y destrozado por el tiempo tronco, y volvió con los pensamientos a la noche anterior... A la habitación de Helena, a su cabello disperso sobre la almohada, sus delicadas manos, sus labios suavemente sonrientes, su pequeño lunar sobre el pecho derecho... Tan solo con pensar sobre ello se apoderaba de él una ola de calor y gozo - esa sensación no la había tenido nunca... Suspiró y cerró los ojos...
La luz de la lámpara de noche lucía tímidamente en la pequeña habitación. Estaba sentada de espaldas a la ventana. Sus delgados dedos recorrían el teclado. La camisa de noche se deslizó ligeramente, descubriendo su brazo. La blancura del material destacaba el bronceado miel de su cuerpo. Se recogió el pelo en una coleta, dejando únicamente algunas mechas sueltas. Ya eran las once, cuando apagó el ordenador. Se sentó sobre la cama y se soltó el pelo. Se peinó con los dedos. Cayeron como una cascada sobre sus delicados hombros. La luz de la luna se reflejaba sobre su rostro y en sus ojos.
Se ató la cuerda de la camisa de noche y apagó la luz. Dejó la ventana abierta, aquella noche era calurosa... Él, guiado por la necesidad de verla voló cuidadosamente a la ventana y en silencio entró en la habitación. Dormía con la cara hacia la ventana. La luz blanca de la luna cubría su rostro y destcaba sus rasgos. Los labios mojados, pequeña nariz, largas pestañas... Él se encontraba de pie en la ventana memorizando cada detalle. Después de un largo rato se acercó y tocó sus mechas dispersas por la almohada. Suavemente... Con cuidado... Ya conocía su blandura. Había hecho lo mismo la noche anterior, cuando ella lloraba... Sola, desprotegida... Se movió un poco. La manta se deslizó sobre ella y cayó al suelo dejando a la vista su muslo desnudo. Él tragó saliva. Cerró los ojos y aspiró un dulce olor. El olor a jazmín. Ya lo sabía. Ya sabía cómo iba a acabar aquella noche... Caminó alrededor de la cama a paso lento y pasó su dedo por el frío material del edredón. Ella dormía sonriendo a sus pensamientos... Elevaba y bajaba el pecho lentamente. Él se inclinó. Su cabello negro por un momento rozó el frágil cuello de la chica... sentía el calor de su cuerpo... tocó suavemente con los labios su oreja y le susurró: duerme con un dulce sueño, sueño de ángel... Su mano fue en dirección de la mano de Helena. Se encontraron... Con las yemas de los dedos recorría cada uno de los dedos de ella. Durante mucho tiempo... Con precisión... Temblaba de la emoción, quería mas... y más rápido... Pero se detuvo y lentamente subió hacia arriba... saboreaba cada centímetro de la joven piel. Los brazos... suaves como la seda... el cuello... la acariciaba... conocía... memorizaba. Pasó el dedo índice por la línea de los labios - suaves, tentadores... Y bajó. El fascinante viaje por el mapa de su cuerpo... La barbilla... el cuello... abajo y mas abajo... Paró un instante. Ya no luchaba consigo mismo. Cuidadosamente desató las cuerdas de la camisa. Sin resistirse se deslizaron por sus dedos. Destapó el material, como si estuviese abriendo el libro mas grande del mundo... Una ola de calor recorrió su cuerpo... Contuvo el aliento... Vió aquello que quiso ver desde el momento en que la conoció. Inseguramente acercó la mano... se movió. Él se alejó asutado... pero regresó. El delicado toque hizo que Helena moviese la cabeza para atrás y suspirase... La luna salió de detrás de las nubes... con el brillo frío le indicó el camino. Lo siguió sin vacilar. Sentía debajo de sus dedos su cálido cuerpo... Un fuego increíble quemaba a los dos... ella respiraba cada vez más deprisa.... y más deprisa... de sus labios desprendió un silencioso gemido... apretó ligeramente los dedos contra el edredón... Suspiró y se acomodó en la almohada. Él rozó delicadamente sus labios todavía ligermanete abiertos.... Como despedida... Se subió encima de la ventana y voló hacia arriba. Sus alas estuvieron durante un rato largo sobre el aire, bailando con el aire, observando el ineteriror de la ventana ya cerrada. La chica soñaba su dulce sueño... el sueño sobre un ángel...

Continuará

SiiGelaa proontoooo xFaaa! =)

OMG qee bien escribes!! sígueLa bittee!

tiaaaa me encaaantaa!!

paso deprisaaa!!

pero k sepas k es uno de los mejores ficc k e leidoo!!

esta GENIAL

...Como decirtelo....

emh..esto


¡¡SIGUEEEEEEE!!
O probaras mi furiaaa!!

sacare mi motosierra y te rebanare como a lua y a yle =D! os rebanare a todas como no sigais, pero en especial a ti....

Recuerda.. te estoy vigilando...
y soy la loca chalá de la motosierra electricaaa..*necesito un icono de una sierraaa T___T*




Continuaaa

aii diooos
esta geniiiaaaaaaaaaaaaal
y se llama como yo wiiii
muchisima ilusion !
=)
me encanta enserioo
siguela xfiiss

madre! maS te vale seguiRlaa *_*

jodeR!! no veaS como escribe la niña! ¬¬

pa escritora vaS amoS! del tiron! *_*

te expresaS super mega bien!!!!

me quedO embOba cuandO la leO

me lo imaginO y toH!!

sigueLaaaaaaaaaaa!

Chicas.. siento tardar tanto siempre, se me olvidaba y ya tenia este capi desde hace dias... T_T sorry, ademas, creo que no la voy a seguir.. no se como terminarla, en realidad esto es un mini fic porque de todas maneras iva a tener solo unos cuantos capis... pro solo podria llegar hasta un punto de la histo, si quereis claro, pero luego el final lo veo dificil.. no se no tengo ideas.. =S

T_T

por cierto, hoy ha salido en internet este nuevo montaje.. a mi me parece perfecto.. un ángel de alas negras, Bill, igual que en la fic =D




~ 3 ~

Y otra vez sonrió sorprendido por sí mismo... él hizo que... él. Sin saber cómo... No se esperaba que podía ser tan bonito... y ni siquiera difícil. El cuerpo de ella hablaba, él escuchaba... La extraña unión de dos almas tan lejanas... en un momento y sólo para un instante, corto y errático... pero intenso, y en la memoria eterno, al cual quiere volver todo el tiempo.
Y la sonrisa desapareció... junto con la vuelta del sentimiento de culpabilidad. Porque no tenía derecho. Ella no era suya. Se coló ahí como un ladrón. Como un intruso. Silenciosamente y sin autorización.
No tenía derecho.
Intentaba huir de ese pensamiento, pero no podía... volvía. ¡Tenía que haberse mantenido lejos! ...no volver. Aquel mundo dejó de existir para él....
Se cerró ante él...
Pero él lo echaba demasiado de menos, para irse, desaparecer y olvidar... condenado a aislarse y al preocupante, metálico, despiadado frío... deseaba cercanía, calor...
La muerte..
No se la imaginaba así. No así. En realidad no pensaba mucho en ella. Vivía el momento. Lo que importaba era sólo aquí y ahora. No tenía tiempo para pensar. Los conciertos, grabaciones, galas y premios, el carrusel del éxito.Tan colorido como irreal. Pensaba, que el mundo estaba a sus pies. Los dos junto con Tom se habían encontrado perfectamente en aquel alocado circo. Los hermanos Kaulitz. Inseparables...
La gente pensaba que Tom era un rebelde ligón, una persona que solo se quiere divertir, pero en realidad él era diferente... y él, seguramente tan sólo él, le entendía. Tom sabía todo sobre él. Le apoyaba, cuando no podía con los comentarios malintencionados, crueles... Tom sabía lo difícil que era para él ir por la vida. Una personalidad alocada y un alma frágil no lo facilitan. Sólo se tenían a sí mismos. Rechazados por sus compañeros, sobre todo él - con una gama de ideas extrañas. Ni siquiera intentó igualarse a ellos. Se entregó a su mayor pasión - la música, y Tom, estaba a su lado. Siempre.
Como una sombra.
¿Entonces porqué no estuvo ese día? A lo mejor todo hubiese sido diferente... A lo mejor habría parado, apagado sus emociones... Puede...
No se las apañaba en esas situaciones - se caía a acachos... Estaba harto de tantas preguntas sobre quién es... A veces él mismo se perdía en ello... No le dejaban vivir en paz... Ya no tenía fuerzas... Un alma romántica...
Corría entonces sin saber a dónde. Veía el mundo a través de las lágrimas. No prestaba atención a nada mas, típica situación. En los ojos de la luz el coche. En los oídos el pitido de los neumáticos y el grito de una mujer. Los ojos abiertos al máximo. Terror. Y silencio... preocupante, eterno... silencio y oscuridad... En realidad, un simple accidente... entre la vida y la muerte...
Abrazó con los brazos las rodillas y apoyó en ellas la cabeza. Las mechas negras le taparon la cara. Él mismo era el culpable. Si fuese mas fuerte... Levantó la cabeza, y clavó los dedos en la dura, seca tierra, que metió entre las uñas.
El enfado predominaba en él. El ángel de alas negras odiaba el no-vivir. Le tenía asco. Y eso le daba fuerzas. Desprecio hacia la muerte, hasta desprecio hacia sí mismo. Odiaba ese lugar, estar ahí sin sentido, lejos del mundo. Estaba harto de esperar, para él era una eternidad, hasta que se termine aquello, hasta que se pueda ir.
Por eso tomó aquella decisión y volvió. Sabía, que se está arriesgando, ahora sufría mucho mas. El odio se hacía furia. El ángel de alas negras permitía que se apoderase de él, cada rincón de su organismo. Soltó de sus pulmones un rugido. Todavía no.... todavía no.
El viento movió una capa de polvo, creando una alfombra en la superficie de la tierra. El aire era cada vez mas denso. Cada vez mas pesado, vibrava... Con fuerza movía las ramas de los árboles, arrancando de ellas las inocentes hojas. Ahora bailaban sobre la tierra, se mezclaban con el viento....
El ángel se levantó despacio. Bajó la cabeza y cerró los ojos. Aguantó la respiración. En la cara tenía marcada la furia, la tristeza y el sufrimiento... Apretó los músculos... Elevó las alas. Un grito espeluznante salió de él. Después de unos instantes se seguía oyendo el eco del grito a lo lejos... Él seguía de pie sin moverse.
El ángel de alas negras había desprendido toda su furia afuera...


Puede que continue... T_T